Funciones de plasma sanguíneo

El plasma es la porción líquida de la sangre. Este líquido ligeramente amarillo se compone de 90 por ciento de agua, de acuerdo con el Instituto Franklin. Aunque a menudo se piensa que es menos importante que las células de la sangre que transportan oxígeno y proporcionan inmunidad, el plasma es igualmente importante. Es responsable de muchas funciones diferentes en el cuerpo.

Transporte de nutrientes

Una de las funciones más importantes del plasma es transportar nutrientes por todo el cuerpo. A medida que los alimentos se digieren en el estómago y los intestinos, se descomponen en sus componentes. Esto incluye los aminoácidos (los componentes básicos de las proteínas), los lípidos (grasas), los azúcares (glucosa) y los ácidos grasos. Estos nutrientes se distribuyen a las células en todo el cuerpo donde se utilizan para mantener funciones saludables y el crecimiento.

Desechos de transporte

Además de transportar nutrientes, el plasma transporta productos de desecho, como ácido úrico, creatinina y sales de amonio, desde las células del cuerpo hasta los riñones. Los riñones filtran estos desechos del plasma y los excretan del cuerpo en forma de orina.

Mantener el Volumen de Sangre

Aproximadamente el 7 por ciento del plasma es proteína, según la Enciclopedia científica. La proteína que se encuentra en la concentración más alta en plasma es la albúmina, una proteína importante para la reparación y el crecimiento de los tejidos. Esta alta concentración de albúmina es importante para mantener la presión osmótica de la sangre.

La albúmina también está presente en los fluidos que rodean las células, conocido como líquido intersticial. La concentración de albúmina en este fluido es menor que en el plasma. Debido a esto, el agua no puede pasar del líquido intersticial a la sangre. Si el plasma no contuviera tanta albúmina, el agua pasaría a la sangre, lo que aumentaría el volumen de sangre y provocaría un aumento en la presión arterial que haría que el corazón trabajara más.

Balance de electrolitos

El plasma transporta sales, también llamadas electrolitos, por todo el cuerpo. Estas sales, que incluyen sodio, calcio, potasio, magnesio, cloruro y bicarbonato, son importantes para muchas funciones corporales. Sin estas sales, los músculos no se contraerían y los nervios no podrían enviar señales hacia y desde el cerebro.

Defender el cuerpo

El plasma transporta otras proteínas además de la albúmina en todo el cuerpo. Las inmunoglobulinas, también conocidas como anticuerpos, son proteínas que combaten sustancias extrañas, como las bacterias, que invaden el cuerpo. El fibrinógeno es una proteína necesaria para ayudar a las plaquetas (células de la sangre) a formar coágulos de sangre. Al llevar estas proteínas, el plasma juega un papel fundamental en la defensa del cuerpo contra la infección y la pérdida de sangre.